viernes, mayo 31, 2013

Despedida



En algún lugar debe haber un basural donde están amontonadas las explicaciones. Una sola cosa inquieta en ese justo panorama: lo que pueda ocurrir el día en que alguien consiga explicar también el basural. Julio Córtazar. Destino de las explicaciones.

Hace mucho más de un año que no escribo en mi blog y eso es porque hace más de un año las explicaciones para la situación vigente están cargadas de absurdo. Los presuntos liderazgos políticos actuales parecen una burla al intelecto, por decirlo de una manera educada.
Los eventos cotidianos que hace varios años atrás tenían explicaciones mundanas ahora tienen explicaciones impresionantes. Ya nada es producto de un error humano o la mala intención de un cristiano común. Las proporciones de los eventos cotidianos es épica, global, vil, caótica y absurda. Ahora la palabra guerra se usa tan a la ligera que me da vergüenza con los países que sufren y sufrieron estas atrocidades en tiempos más recientes y con consecuencias mucho más graves que las que intentamos explicar ahora.
Actualmente se aceptan con la misma facilidad los deslices propios con la que se juzga a los contrarios. Este post, el último de este blog, no pretende ser una explicación de nada. Este post es una despedida, pero más de mis poquísimos lectores, es una despedida a la utilidad de las explicaciones.
En la vida, he tomado ya las decisiones que orientarán las siguientes de un modo definitivo. Seguramente podré compartirlas con ustedes y otras personas más de otras formas. Espero que podamos seguir caminando juntos hacia un mundo mejor y que nunca recordemos el presente con nostalgia, sino que disfrutemos orgullosos de un futuro difícil de superar.
¡Dios los bendiga!